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Descripción en español:
Prepárate para un día en el que tradición, historia y naturaleza se entrelazan en un solo recorrido. Desde Cusco, viajarás hacia el sur para descubrir uno de los últimos vestigios vivos de la ingeniería inca y los paisajes únicos del circuito de las Cuatro Lagunas.
Tras un breve trayecto matinal, disfrutarás de un reconfortante desayuno en Cusipata antes de adentrarte en un recorrido que te llevará por miradores naturales y encantadores pueblos andinos. El mirador de Combapata, la pintoresca plaza de Pampamarca y la vista del antiguo volcán de Pabellones te irán preparando para el momento cumbre del día: la llegada a Q’ewe, hogar del puente inca Q’eswachaka.
Construido íntegramente con fibra vegetal de ichu, este puente colgante es renovado cada año por las comunidades locales siguiendo técnicas ancestrales transmitidas de generación en generación. Reconocido por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, Q’eswachaka no solo es una maravilla arquitectónica, sino también un símbolo vivo de la conexión entre el hombre andino y su entorno.
Podrás cruzar el puente, admirar el cañón que lo abraza y descubrir cómo el tiempo parece detenerse en este rincón de los Andes. Después, la ruta continúa hacia el circuito de las Cuatro Lagunas: Pampamarca, Asnacqocha, Acopia y Pomacanchi. Cada una ofrece un escenario único, donde las aguas tranquilas reflejan el cielo andino y la abundante fauna —aves acuáticas, peces y camélidos— se convierte en parte del espectáculo natural.
La experiencia culmina con un almuerzo buffet en Cusipata, donde podrás degustar platos locales antes de emprender el retorno a Cusco. El tour finaliza cerca de la Plaza de Armas, dejándote con la sensación de haber viajado no solo a través de paisajes impresionantes, sino también a través del tiempo y la tradición.
